Richard Galustian
El gobierno británico nunca ha sido más impopular
entre los británicos. Está siendo aplastado por problemas exclusivamente
propios y generados por su propia negligencia e incompetencia, por un Brexit
desastrosamente manejado, medidas de austeridad paralizantes, un público en
general que aún se tambalea por el horror del incendio de Grenfell y un
Servicio Nacional de Salud en constante deterioro que, dado que es el cuarto
mayor empleador en Europa, es un tema profundamente preocupante.
A la luz de esto, la respuesta del diplomático
británico Sr. Stuart Gill OBE en su OPED al Sunday Times of Malta, donde afirma
que, «Hoy, solo Rusia combina un registro de asesinatos patrocinados por el
estado como un motivo claro para apuntar a Sergei Skripal, y una historieta con
los agentes ‘Novichok’«se lee como otra repetición desesperada de las
falsedades e insultos hacia Rusia emitidos por el Gobierno inválido de Theresa
May. (Tenga en cuenta que el inventor de Novichok se mudó a los Estados Unidos
hace más de veinte años).
La observación del Sr. Gill es solo uno de los
numerosos insultos infantiles que circulan en la actualidad. Las explosiones de
ira del Secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Boris Johnson, y
del inexperto Ministro de Defensa, Gavin Williamson, con su Rusia, «Cállate y
vete» o «Putin es como Hitler» y «Rusia probablemente lo hizo», han sido poco
profesionales, por decirlo benévolamente, sin mencionar la ofensa que significa
para los rusos de hoy y sus familiares que murieron por decenas de millones
luchando contra Hitler y los nazis en la Segunda Guerra Mundial.
Pero las noticias en las calles británicas sugieren
algo diferente, y muchos ciudadanos afirman que tienen serias reservas sobre la
veracidad de las declaraciones de su gobierno. No solo el público, sino
profesionales y académicos de todo el mundo han dejado claro que piensan que es
una tontería.
Dave Collum, profesor de Química Orgánica en la
Universidad de Cornell ha sido muy abierto en las redes sociales en respuesta a
las afirmaciones infundadas de que «solo» Rusia podría haber fabricado
Novichok. Reiteró en Twitter el 27 de marzo:
Lo diré de nuevo: Cualquiera que te diga que este
agente neurotóxico debe haber venido de Rusia es un mentiroso, un completo
mentiroso. Son compuestos simples …. Son moléculas intrínsecamente simples,
aunque peligrosas de fabricar. Nada de lo que sé lleva a Rusia. Ciertamente no
afirma que de alguna manera requiere una tecnología militar única. Es simple
química orgánica.
Tanto la policía británica como los científicos
militares involucrados en la fabricación de armas químicas y biológicas en
Porton Down, ambos afirman que la investigación tomará semanas, tal vez meses,
antes de que se pueda llegar a una conclusión formal.
Aparte del conocimiento de que el agente nervioso era
«de un tipo fabricado por Rusia», que es vago en el mejor de los casos,
repasemos algunas de las incoherencias.
Decenas de médicos, paramédicos, bomberos y policías
se encontraban en las cuatro escenas: el banco del parque, donde se encontraban
el padre y la hija Skripal, el restaurante donde habían comido recientemente, y
en el automóvil que la hija del Sr. Skripal había conducido. En casa, se dice
que solo un policía, DS Bailey, ingirió este veneno mortal de tipo militar. Se
recuperó por completo al cabo de unos pocos días.
Sabemos que el hospital de Salisbury declaró
categóricamente que nadie, aparte de las tres personas en cuestión, muy cerca
de este presunto veneno fue tratado por ningún síntoma, sin embargo, nos
dijeron que Novichok es diez veces más mortal que cualquier veneno producido
nunca. Entonces, ¿cómo es que este veneno de tipo militar, diseñado para matar,
no simplemente incapacitar, y supuestamente expuesto en un área amplia, no mató
a nadie, incluidas las personas para las que estaba destinado?
En consideración a lo anterior, parece que la prisa
del gobierno británico en juzgar horas después del evento no estaba
justificada.
La prisa de muchos países, incluido EEUU, por expulsar
a los diplomáticos rusos es una reacción relativamente leve causada por el peso
que el Reino Unido puede reunir, pero preveo que esto finalizará con su
reincorporación en un futuro cercano.
Sir Tony Brenton, un experimentado diplomático
británico que fue el embajador del Reino Unido en Moscú tras el envenenamiento
de Alexander Litvinenko, dio una respuesta moderada pero enfática y razonable.
Dijo: «Obviamente tenemos que reaccionar con firmeza para hacer frente a la
indignación por lo de Skripal, pero en algún momento vamos a tener que volver a
hacer negocios con Rusia».
Añadió que si bien apoyaba las medidas adoptadas por
el Gobierno, advirtió que el lenguaje de los ministros había sido
«innecesariamente virulento».
A pesar de las maniobras diplomáticas contra Rusia,
Sir Tony observó de manera importante: «Me parece que Gavin Williamson y Boris
Johnson están peligrosamente cerca de quemar esos puentes».
Lo que también podría sorprender a muchas personas en
todo el mundo es la opinión de los rusos comunes y su reacción real a estas
acusaciones de Gran Bretaña. Incluso la asombrosa designación estadounidense de
neoconservador John Bolton por parte de Trump.
El Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi
Lavrov, explicó mejor la posición de Rusia en una sesión de preguntas y
respuestas con los medios en Hanoi el viernes 23 de marzo de 2018, donde dijo:
Los británicos están corriendo por todo el mundo,
exigiendo que sus socios sigan su ejemplo. No se han investigado los hechos, lo
que nos lleva a pensar que es una provocación… El reciente nombramiento del Sr.
John Bolton para el puesto de Asesor de Seguridad Nacional de EE.UU. también es
interesante, y ciertamente es un diplomático duro. Pero es claramente un
profesional que seguirá las políticas delineadas por el presidente Trump. A
pesar de todo, la política de Trump, que reiteró el otro día en su conversación
con el presidente ruso Vladimir Putin, es devolver las relaciones con Rusia a
la normalidad y comenzar a cooperar para resolver asuntos de interés común para
ambos países.
Durante la llamada de felicitación de Trump a Putin
por su exitosa reelección presidencial, los dos hombres acordaron reunirse.
Este hecho no ha sido publicitado por los principales medios de comunicación.
Alguien debería informar al Gobierno británico
conservador incompetente y bastante aislado de que están claramente fuera de
lugar cuando se trata del estado de las relaciones de EE.UU. con Rusia, ya que
creo que se avecina un inminente acercamiento entre las administraciones Trump
y Putin.
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