domingo, 12 de septiembre de 2021

A 20 AÑOS DEL 11S PERSISTEN LAS MENTIRAS EN LOS MEDIOS

 

¿Cómo es posible que después de 20 años del atentado de las Torres Gemelas los medios de desinformación masiva que tenemos persistan en la mentira de que unos aviones las derribaron?

La explicación es muy sencilla. Los autores intelectuales de aquello no deben considerar aún que deba saberse la verdad.

¿Quién pudo mantener la mentira durante 20 años y a tantísima gente?

La respuesta es obvia. Alguien con un poder inmenso. Alguien con tanto dinero que ha sido capaz de tener secuestrada la evidencia para casi todo el mundo.

Digo a casi todo el mundo que cree a ciegas lo que le cuentan los mentirosos de todos los tiempos.

Los muy bien pagados manipuladores de masas que hacen su trabajo desinformativo con eficacia tienen abducida a una masa que no entiende, no piensa y no duda porque no sabe de casi nada, a la que le cuentan que se ha visto una manada de burros volando y se lo traga.

La gran mayoría de la gente piensa que los medios informan la verdad y que los gobiernos no le van a mentir en cosas de tan gran envergadura. La realidad es cruda pero es así. La gran mayoría de la gente no lee libros, no dedica un tiempo a reflexionar, a dudar de lo que le cuentan y además no percibe que se lo dan cocinado. La gran mayoría sólo discute ya de futbol y de la última chorrada de un reality en televisión.

A quien no pueden engañar con falsos informes científicos es a los profesionales que tienen conocimientos mínimos de estructuras y edificaciones, de demoliciones controladas y unos pocos estudios de física, pero que como siempre no les dan la oportunidad de contar su versión en ningún programa de televisión.

Es así como la mayoría de arquitectos e ingenieros no nos creímos la versión del informe oficial del NIST ante la evidencia científica de los estudios independientes, análisis y visualización de los videos del sospechoso desplome de las Torres Gemelas y del poco mencionado World Trade Center 7, edificio cercano de 47 plantas que se desplomó a las 5 de la tarde, varias horas después de que chocaran los aviones contra las torres, sin que ningún avión impactara en él ni le afectaran los derrumbes de las Torres Gemelas.


Todo este estudio irrefutable fue presentado por el Richard Gage, representante de la Asociación Americana de Arquitectos e Ingenieros por la Verdad del 11S en su gira de conferencias por Europa.

Es imprescindible que veas este video para que te convenzas. Es un estudio técnico riguroso basado en evidencias.


MAS INFORMACION EN:       https://www.ae911truth.org/


jueves, 2 de septiembre de 2021

Fernando Paz analiza su nuevo libro ¡Despierta!

Cómo las élites están controlando el mundo

 Javier Navascués.


Fernando Paz es Profesor de Historia y Filosofía. Escritor, ha publicado: ‘Europa bajo los escombros’, ‘El fracaso de una utopía’, ‘Antes que nadie’, ‘Nuremberg, juicio al nazismo’ y otros dos libros en colaboración: ‘Proceso a José Antonio’ y ‘El libro negro de la izquierda’. Pueden seguirle en twitter: @FernandoPazdice.

En esta entrevista analiza en profundidad los aspectos básicos de su nuevo libro ¡Despierta! Cómo las élites están controlando el mundo.

En octubre de 2019 tuvo lugar en Nueva York el Evento 201, un encuentro al más alto nivel en el que se dieron cita las principales agencias globalistas. Allí se simuló la irrupción de una pandemia y se habló de confinamientos, vacunas…..Tres meses después la OMS declaró oficialmente la pandemia covid 2019 y se produjo todo tal y cómo habían dicho en la simulación. ¿Este hecho bastaría para probar que todo obedece a un plan previamente diseñado (que tuvieron la desfachatez de anunciar antes)?

En el Evento 201 se simuló el estallido de una pandemia que se extendería por el mundo entero y cuyo agente causante sería un novedoso coronavirus particularmente contagioso, procedente del SARS, y que saltaría de un murciélago a un humano. Durante el primer año, no se dispondría de vacuna. Las semejanzas con lo que comenzó a suceder apenas un mes más tarde son escalofriantes.

Bien cierto es que eso no es una prueba concluyente. Pero ¿había un plan previamente diseñado, cuya ejecución se ciñó a lo que se habló en Nueva York en octubre de 2019? Los disidentes chinos, que como es natural odian al Partido Comunista, estarían encantados de probar que fue el PCCh el causante de la pandemia. Pero, en general, no creen que el escape del coronavirus haya sido deliberado. Hoy por hoy no puede saberse. Personalmente me inclino a pensar que, pese a las similitudes apuntadas, el desarrollo de los acontecimientos ha sido fortuito. Puede parecer difícil de creer; en todo caso, no es algo a lo que conceda mucha importancia.

Y es que si no hubiera sido en un laboratorio de Wuhan en el invierno de 2019-2020, habría sido en el verano de 2022 en un centro de investigación farmacéutica de la India, por ejemplo. Porque, según han declarado antiguos directivos de la OMS, lo que sí había era una presión de las farmacéuticas para que se declarase una pandemia desde hacía bastantes años. Los dueños de las farmacéuticas coinciden con los principales agentes globalistas, pero encontraron resistencia, porque el globalismo no es un mundo homogéneo. Y, por otro lado, estos han aprovechado la situación para, como dijo Pedro Sánchez “implementar una serie de medidas que ya estaban en marcha, pero que la pandemia nos va a permitir cubrir con mayor rapidez".

Si este escenario - tal y como se produjo - fue diseñado o no, poco importa. Algo muy parecido hubiera sucedido antes o después.

Desde ese momento nos han confinado, impuesto las mascarilla y la vacuna. Los ataques a la libertad han sido mayores que nunca. ¿Por qué no ha habido apenas resistencia?

En otros países ha habido más resistencia que aquí, y eso que han padecido muchas menos restricciones que nosotros. No somos conscientes del grado de sumisión al que estamos sometidos en España a través del largo proceso de narcotización que lleva durando décadas. En muy pocos sitios los confinamientos han sido tan radicales como aquí y, en esos escasos lugares, no han faltado protestas.

Las razones que explican nuestra sumisión son complejas. Somos un país sin una vigorosa sociedad civil, un país con escasa cultura política y en el que la fibra moral está muy resquebrajada.

En esas condiciones, resulta fácil imponer el terror social como se ha hecho, a través de los medios de comunicación tanto públicos como privados. Un mensaje completamente homogéneo, sin fisuras, que ha incluido la persecución al disidente como agente metafísico del Mal.

En el caso de España, los medios de comunicación han silenciado sistemáticamente lo que sucedía en otros países para que no pudiéramos comparar. Incluso un responsable de Sanidad de la CAM pidió públicamente que se censurasen las imágenes de los graderíos en la Eurocopa de este verano porque se veía cómo, desde San Petersburgo hasta Londres, pasando por Roma o Copenhague, nadie llevaba mascarilla en los estadios.

Ya ni se molestan en ocultar el desprecio que les merecemos. La población no debe saber sino lo que la élite determine (llamar élite a esto que nos gobierna es ciertamente abusivo; dejémoslo en oligarquía).

Igualmente Trump fue expulsado de la presidencia y el propio presidente de Estados Unidos vetado en las redes sociales, nunca las redes sociales habían tenido tanto poder. ¿Estamos ya viviendo lo que avanzó la ciencia ficción de que un poder global determinaría lo que está bien y lo que está mal?

En primer lugar, estamos viviendo una cooptación del espacio público por los intereses privados. Es paradójico que la izquierda proteste por privatizaciones que, comparativamente, son ridículas, mientras colabora con los intereses de las empresas privadas más poderosas del mundo, que se están apoderando de las organizaciones e instituciones públicas más importantes, y que están sustituyendo a los estados y poniendo estos a su servicio.

Pero es que, además, las redes sociales no pueden - legal y moralmente hablando - determinar qué se publica y qué no en sus portales. No pueden imponer unas normas que contravengan la legalidad. Hasta la Unión Europea se lo ha recordado. Porque no son medios de comunicación, sino canales de comunicación. Por lo tanto, no tienen derecho de censura por sí mismas, y solo pueden denunciar los contenidos que consideren que vulneran la ley en una circunscripción en concreto. Y que el juez, y no ellos, procedan conforme al ordenamiento jurídico. Naturalmente, las redes sociales ignoran olímpicamente todo esto; pueden afrontar pagos multimillonarios en caso de recibir condenas de esta cuantía.

Su complemento natural son las verificadoras, una de las mayores vergüenzas de estos aciagos días. Empresas que son, no pocas veces, verdaderas generadoras de bulos. Las verificadoras han sido creadas desde el Poynter Institute, uno de los brazos más visibles de la Open Society Foundation de George Soros. Su conexión con la big tech les permiten copar los primeros puestos de búsqueda en Google, por ejemplo, de modo que alguien interesado en una determinada información encuentra en abundancia el desmentido antes que la afirmación original que generó este; de este modo, la inmensa mayoría solo accede a la información de las verificadoras.

Ahora, míster Gates trabaja en la creación de una red de verificación que incluya imágenes y que determine para todo el planeta lo que es correcto y lo que no lo es.

La agenda 2030 asoma en el horizonte, como algo que nadie puede cuestionar y anunciando una gran dictadura global. ¿Por qué pocas voces denuncian esta aberrante imposición que atenta contra las libertades más elementales?

Mire, en Gran Bretaña se ha publicado esta pasada primavera un libro, “State of Fear", en el que la autora, Laura Dodsworth, recoge las denuncias de un grupo de científicos que confiesan haber instalado a propósito el miedo en la población a fin de hacer cumplir las medidas del gobierno en la población. Se aterrorizó a esta deliberadamente, para justificar su confinamiento y las restricciones de todo tipo.

Lo mismo ha pasado en España, corregido y aumentado. El miedo es algo irracional, y no desaparecerá con argumentos racionales. Tenemos el ejemplo de la mascarilla: en espacios abiertos su eficacia es sencillamente nula. Sin embargo, el fin de la obligatoriedad no ha hecho mella en un 60-70% de la población que sigue portándola, aunque no solo no sirva, sino que sea perjudicial. Puedes pasear en mitad del monte, a dos horas a pie del lugar habitado más cercano, y encontrarte paseantes solitarios con doble mascarilla. Es una aberración, solo explicable porque el miedo se ha apoderado de sus vidas.

En cuanto a quienes pudieran denunciar esto…Para cualquier observador imparcial, no puede dejar de resultar llamativo la unanimidad de las informaciones por más que usted cambie de canal, de digital o de dial. Profesionales de la medicina y de la información que están pagados por las farmacéuticas, los hay y muchos. Pero lo esencial es que los propietarios de los fondos buitre que poseen los principales medios de comunicación en España (Atresmedia, PRISA, Mediaset) son los principales accionistas de los bancos más importantes, los mayores accionistas del IBEX-35 y…accionistas principales de las big pharma, Pfizer, Moderna, etc…¿Cómo van a denunciar a las farmacéuticas desde un medio de comunicación cuyo propietario lo es también de las farmacéuticas?

Mientras China crece y las farmacéuticas se lucran nos acercamos a un gran colapso económico. ¿No comprenderemos la gravedad del reseteo hasta que se produzca?

Téngalo por seguro. Nos van a resetear, y la mayor parte de la gente estará contenta. No volveremos a la vida como la hemos conocido. Los primeros beneficiarios los ha señalado usted; China y las farmacéuticas. El gigante asiático ha reactivado su crecimiento a partir de las exportaciones y obtenido unos beneficios como en sus mejores tiempos; las farmacéuticas han conseguido beneficios fabulosos, que les permiten adueñarse de nuestras vidas a través de lo que ya se empieza percibir con claridad como una dictadura biosanitaria. China se ha convertido en el modelo al que nos dirigen las élites globalistas.

Por otro lado, mediante la cronificación de enfermedades y la sobremedicación, hoy Occidente es presa de las grandes corporaciones farmacéuticas que, para mantener el negocio, necesitan ese terror social. Pfizer había duplicado sus beneficios en 2020 antes de sacar las vacunas; quizá así entendamos por qué se han abstenido en todo lo referente a prevención y curación del covid-19. Nada de esto, solo vacunas. La curación solo se aplica a los enfermos; las vacunas, a todos. No hay que ser muy listo para saber dónde está el negocio.

El terror social - clave de arco del sistema en el que nos han sumergido - explica que la población, aunque con reticencias, se haya pinchado un compuesto producido por las empresas más corruptas del mundo, repetidas veces condenadas por fraude, soborno y mala praxis comercial y profesional. Un fabricante, además, que rechaza toda responsabilidad acerca de lo que pueda pasar con su producto, un producto elaborado en ocho meses en lugar de ocho años y del que se desconocen los efectos a medio y largo plazo, sencillamente porque no ha trascurrido el tiempo suficiente.

¿Cómo es que la población se ha decidido a asumir ese riesgo? Pues porque se le ha dicho que la vacunación es el único modo de terminar con esta pandemia; la situación de emergencia planetaria exige correr el riesgo. Pero ¿es eso cierto? Pues mire usted, en absoluto. De acuerdo a los datos oficiales (y hay convincentes razones para ponerlos en cuestión, a la baja) en 2020 se ha producido una sobremortalidad por COVID en nuestro país de unas 50.000 personas. Eso significa, uno de cada novecientos españoles. No, no es un error. 1 de cada 900. ¿Una proporción tal justifica la asunción del riesgo de la vacunación masiva en las condiciones actuales en las que ha sido elaborada la vacuna?

Es claro que no. Pero es que la vacuna no hay que interpretarla desde el punto de vista sanitario, sino desde el ideológico. Aquí se dan la mano China y las farmacéuticas. Porque China, como se ha dicho, es el modelo de los globalitarios, cuya aspiración es controlar a la población como hace el gobierno de Beijing; este no necesita de justificaciones, pero en Occidente no se puede obrar de igual modo (al menos por ahora). El corolario de la vacunación, el pasaporte covid, es el documento que nos lleva a China. Por nuestro bien, claro, y en el nombre de la salud, elemental dios de una sociedad hedonista.

Incluso ya se habla de un experimento de la caída de internet a nivel global, algo que tendría gravísimas consecuencias, pensemos por ejemplo solamente en el dinero de los bancos etc…

La desaparición del dinero en metálico, en efectivo, es un objetivo que habrá de demorarse un tiempo, si no sucede nada extraordinario. De hecho, el PSOE lo propuso el año pasado en el Congreso de los Diputados. Le fue rechazado y hasta Europa le dio la bronca por haberse dejado llevar por un excesivo celo cipayo. Era demasiado pronto; los experimentos que habían tenido lugar en la India unos años atrás - de la mano de Bill Gates; lo siento, es así - fracasaron rotundamente.

Pero el objetivo es ese: terminar con el dinero. El PSOE se tuvo que conformar con limitar las transacciones en metálico a 1.000 euros, naturalmente por nuestro bien, a fin de evitar el fraude.

No es descabellado aventurar que existe, además, un propósito de apropiarse de nuestras cuentas corrientes. Un fallo masivo del sistema, un oportuno hackeo ruso o iraní, un apagón gigantesco quizá atribuible a una tormenta solar…hace tiempo que se rumorea, y lo cierto es que proliferan los artículos al respecto en los medios más generalistas. No sé si se producirá o no, pero el Foro de Davos nos ha prometido que en 2030 no poseeremos nada. Yo les creo.

¿Se puede probar que todos estos hechos son el producto de las políticas de las elites?

Bueno, eso un hecho. No hay especulación alguna en ello. Es una obviedad que las élites son responsables de lo que acontece en el mundo. De esto y de lo demás. Cosa distinta sería establecer si las élites actúan en su propio beneficio o si lo hacen en el de sus pueblos. Eso puede ser más discutible, por cuanto es valorativo; habrá a quien la Agenda 2030 le parezca de perlas, y otros a quien espeluznará. No hace falta que le diga dónde me encuentro yo.

Pero es un hecho que todo esto es consecuencia de las políticas de la élite. Esta tiene un plan que pasa, naturalmente, por retener y reforzar su poder, y por moldear el mundo en función de sus intereses. La población debería entender que la imposición de la Agenda 2030 va esencialmente contra ellos. Todos los objetivos que se señalan en dicho programa son perjudiciales para la población, que es quien va a pagar la factura.

Siendo más precisos ¿quiénes son los que realmente llevan la batuta de estas élites?

La élite es un sistema, más que unos nombres. En esencia, es una proyección del orden anglosajón sobre el conjunto de la humanidad: su concepción del mundo, sus mimbres ideológicos, su sistema político, su orden social.

Perdone la disgresión, pero en la historia humana se dan tres o cuatro grandes tipos humanos con sus respectivas concepciones del mundo y de la moral: el sacerdote, el guerrero, el artista y el comerciante. El globalitarismo es el triunfo de la concepción mercantil del hombre; el triunfo del comerciante, con su perversa idea de que todo tiene un precio, con su obtusa confusión entre valor y precio, y con su voracidad codiciosa.

En otro tiempo las élites eran religiosas o militares, y se les suponía una cierta condición aristocrática; ahora, la élite es poco más que una despiadada pandilla de tenderos entregada a una descarnada competición por morder más mercado. El planeta se les ha quedado pequeño, y sus habitantes somos indignos de su grandeza mercantil. ¡Les debemos Internet…! ¡Y Amazon! ¡Y Google! ¡Y Twitter y Facebook…!…sacre bleu…

Ya no podemos vivir sin ellas. Es un hecho. Nos hemos convertido en sus rehenes. El propósito es que lo seamos por siempre, y cada día más.

Si le quiere usted poner nombres, puede listar los de Gates, Soros, Zuckerberg, Musk, Ted Turner, Kissinger…y miles más. Y, naturalmente, las organizaciones que presiden y desde las que dirigen el mundo.

¿Vamos a una sociedad de esclavos?

Ya estamos en ella. La mayor parte de los españoles vive aterrorizada por un virus que jamás le produciría más que un constipado o una gripe bastante llevadera. La esclavitud les ha anidado en el alma. Ha vivido en un terror lacerante durante meses y ahora vive en un terror de baja intensidad, a medio camino entre el pánico y el simple miedo. Y hasta siente un cierto agradecimiento.

La élite ha diseñado una sociedad de “dos velocidades"; no es un futurible, llevamos ya mucho tiempo viviendo en ella. Ya me he referido antes a eso.

El elemento clave es ahora la tecnología. La confianza en que a través de ella podríamos eludir nuestra servidumbre se ha revelado una mentecatez, como era previsible. Pues al contrario, como escribió hace muchos años el visionario CV Gheorghiu, la tecnología sería el totalitarismo del futuro. No la tecnología al servicio de algo en concreto; no, la tecnología en sí.

La población solo quiere seguridad. Y eso se lo proporciona un sistema de salud, un sistema de control social, de cámaras; quiere sentirse incluida. Prefiere equivocarse con los más que acertar con los menos. Lo entregarán todo para sentirse arropados. Todo. Son décadas de intoxicación y de deconstrucción de nuestra identidad que han desembocado en la producción masiva de peleles. Es lo que hay.

¿Puede organizarse una resistencia eficaz a esta dictadura global que no solo se nos viene encima, sino que ya ha empezado y muchos parecen no darse cuenta?

Es evidente que no es fácil. El miedo es libre. Si fuese por nuestra población, sin duda esto estaría perdido. Pero existe una protesta en Europa con capacidad de contagio. Así lo creo.

Además, y por otra parte, siempre habrá un núcleo resistente. El fortalecimiento de esa resistencia es la tarea que nos toca. Defender la identidad y la libertad. No hay mejor antídoto. No hay otro.

Por Javier Navascués


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FUENTE: https://www.infocatolica.com/blog/caballeropilar.php/2108300413-fernando-paz-analiza-su-nuevo

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lunes, 30 de agosto de 2021

Covid-19: “Esto no es una teoría conspirativa, es una conspiración”

Entrevista al doctor Vladimir Zelenko, el más duro crítico de la pandemia. Tras desarrollar un protocolo que salvó a miles de pacientes, explica por qué las vacunas contra este virus no solo son innecesarias sino un “veneno”. Detalla cómo se orquestó la psicosis mundial y denuncia la hipocresía de los médicos que ocultan la verdad. El imperativo de decir que no para frenar esta locura.

·         POR AGUSTINA SUCRI  (29-08-2021)

 

    Doctor VLADIMIR ZELENKO

No hay otro médico que, como el doctor Vladimir Zelenko, ofrezca una mirada tan profunda sobre lo que vivimos en torno al covid-19. Su interpretación de los datos y los hechos tiene un enfoque sanitario, incluso teológico, y antes que nada de sentido común. La contundencia de sus palabras deja poco espacio para la indiferencia. Pero, además, el haber desarrollado un protocolo con el que trató y salvó a más de 6.000 pacientes con covid lo convierte en una de las pocas voces verdaderamente autorizadas en la materia.
El médico de familia ucraniano-estadounidense explicó en una entrevista con La Prensa por qué se trata de una conspiración, cuáles son las pruebas de cómo se gestó y de qué forma se condujo a la actual psicosis global por la que las personas corren de modo irracional e ilógico hacia una “vacuna innecesaria, venenosa y letal”.

- Hay una campaña mundial con la intención de vacunar -por primera vez en la historia- a toda la humanidad: grandes, jóvenes, niños, enfermos, embarazadas e incluso se están implementado medidas para empujar por la fuerza a las personas a que lo hagan. ¿Cómo hemos llegado a este punto?

- Si hace 18 meses atrás yo hubiera dicho que el covid-19 es un arma biológica artificialmente creada, me hubieran llamado teórico de la conspiración. Ahora, incluso los medios liberales, están de acuerdo con esto. De hecho, conocemos información como por ejemplo que en 1999 el doctor Ralph Baric, en la Universidad de Carolina del Norte de Chapel Hill, modificó una proteína de superficie en un coronavirus de murciélago con la intención de que infecte seres humanos. Y hay un número de patente asociado con esto. Luego, esta investigación fue ilegal en Estados Unidos y Fauci y los NIH (National Institutes of Health) la enviaron a China. En Wuhan aumentaron en 2005 su letalidad al hacerlo más destructivo para los tejidos pulmonares humanos y generador de coágulos sanguíneos. También conocemos un número de patente asociado con eso. Por lo tanto, por la cantidad de información que conocemos está claro cómo un virus animal -de murciélago- se convirtió en infectivo para los seres humanos y luego se hizo letal, un arma biológica. Así que no es una teoría conspirativa, es una conspiración.
Cuando el virus fue liberado, la intención principal -en mi opinión- de esta arma biológica es crear estados crónicos de miedo y ansiedad en la humanidad y causar aislamiento social. Esta es una de las tácticas de la guerra psicológica. La razón por la que esto es importante es porque el aislamiento, la ansiedad y el miedo inducen a una descompensación psicológica en la persona, que vive en un estado de dolor crónico, poniéndola en una situación de vulnerabilidad y de fácil manipulación hacia cualquier curso de acción que lleve a reducir ese dolor. De modo que lo que realmente está ocurriendo ahora es una psicosis global.
Una vez que la humanidad ha sido descompensada para que viva en este tipo de dolor, luego se le da una falsa esperanza -como una vacuna- hacia la cual corren de modo irracional e ilógico con el objetivo de reducir la ansiedad y el dolor que está viviendo.

- Resulta sorprendente que haya un enorme porcentaje de personas que ha optado por vacunarse voluntariamente y muchas otras -en países donde no hay completa disponibilidad de las vacunas, como en la Argentina- que esperan ansiosas su dosis…
- Lo que realmente están pidiendo es una reducción de la ansiedad y del dolor emocional. El problema es que, si uno le da una falsa esperanza a alguien, con el tiempo, no conducirá a ninguna solución. Revisemos los datos. Y le pido a los lectores que no crean en una sola palabra de lo que digo, sino que hagan su propia investigación, que no cometan el mismo error que cometen con el gobierno. Escuchen lo que digo y luego vayan y compruébenlo, vean que estoy diciendo la verdad. Esto es sentido común.
En 2010 el sociópata Bill Gates en una disertación en la conferencia Ted -se puede encontrar en Google- dijo que se debía reducir un 15% la población mundial debido al calentamiento global. Luego, el mismo sociópata, en 2020 hizo un anuncio diciendo que 7.000 millones de personas debían ser vacunadas. Así que hago una pregunta sencilla: ¿Por qué habría de aceptar una vacuna para mi salud patrocinada y respaldada por alguien que quiere reducir la población mundial?

- Usted ha descrito estas vacunas como una “inyección letal de veneno”.
- Así la llamo. Es una vacuna que mata personas o se le puede llamar también “inyección letal de veneno”. Cualquier terapia, cualquier vacuna tiene que ser analizada desde tres ángulos: ¿es necesaria?, ¿funciona?, ¿es segura? Y luego de tener toda esa información, se debe hacer un análisis del riesgo-beneficio y determinar si vale la pena aplicársela.
Veamos si realmente la necesitamos. Los niños sanos de 18 años y menos tienen una tasa de recuperación del covid del 99,998% sin tratamiento, según los CDC. ¿Por qué habría de vacunar a un grupo que tiene una tasa de recuperación de la enfermedad de casi el 100% sin tratamiento con algo que potencialmente podría causar daños? La respuesta es que no se debe a razones médicas, sino que se quiere sacrificar a lo niños.
Si se toma una demografía de 18 a 45 años, de adultos sanos, su tasa de supervivencia del covid es del 99,995% sin tratamiento y alrededor del 100% con tratamiento. Así que pregunto otra vez ¿por qué habría de vacunar a una demografía con una tasa de recuperación cercana al 100% con algo que es experimental y se ha probado que puede ser peligroso?
En cualquiera que ha tenido covid y tiene inmunidad natural, tiene anticuerpos naturales a partir del sistema inmune que nos dio Dios. Esos anticuerpos naturales son mil millones de veces más efectivos que la inmunidad de cualquier vacuna. Si ya tengo anticuerpos y son superiores ¿por qué querría inyectarme con algo experimental para generar anticuerpos inferiores?
Si tomamos la población de alto riesgo, de 45 años o más, o aquellas personas con problemas de salud, esa sí es una población en problemas porque tiene una tasa de mortalidad del 7,5% y eso es inaceptable. Sin embargo, si la tratamos adecuadamente, con tratamiento antiviral ambulatorio temprano, hay docenas de estudios revisados por pares -entre ellos el mío, que fue el primero- que muestran un 85% de reducción de hospitalizaciones y muertes. De modo que podemos reducir la tasa de mortalidad del 7,5% a menos del 1%. Aquí es donde aparece una pregunta interesante: en una población que con el tratamiento adecuado tiene una tasa de mortalidad del 1%, quizás la vacunación podría ser más beneficiosa, no lo sabemos.
Por lo tanto, en la mayoría de los casos, no hay necesidad médica de vacunar, excepto en la población de muy alto riesgo. Pero veamos si funciona. Si miramos los tres países más vacunados en el mundo -Israel, Gibraltar y la isla de Seychelles en el océano Indico-, que tienen porcentajes de vacunación superiores al 80% , están atravesando brotes de la variante Delta. Hay gran cantidad de evidencia de que las personas vacunadas tienen mayor incidencia de la variante Delta y tienen mayores niveles de carga viral. De modo que la vacuna no protege contra todas las cepas.

- ¿La vacuna puede hacer a las personas más susceptibles a nuevas variantes?
- Sí, es correcto. Pero hablemos de las preocupaciones en cuanto a la seguridad. En los tres primeros meses desde el momento de la inyección, la causa principal de muerte son los coágulos sanguíneos que están inducidos por las proteínas espiga que van al endotelio -que recubre los vasos sanguíneos-, causando pequeñas espinas en la vasculatura que dañan a las plaquetas y provocan los coágulos sanguíneos. Esto está documentado y probado por el Instituto Salk de San Diego, uno de los centros mundiales más respetados en investigación de vacunas. Estamos viendo la mayoría de las muertes dentro de los tres primeros días tras la vacunación, en personas que mueren de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, pero las muertes continúan a lo largo de los tres primeros meses.
El segundo gran problema es la miocarditis o inflamación del corazón de las personas. Y también hay mucha preocupación por los abortos en el primer trimestre que se dan en embarazadas que se han vacunado.  
En Estados Unidos, el sistema VAERS admite 13.000 muertes. Un informante dice que son 45.000. Solo para tener un sentido de la escala, en 1976 la vacuna contra la gripe porcina mató a 26 personas y todo el sistema se detuvo. Ahora tenemos 13.000 muertos, un informante que dice que son muchas más y yo digo que son incluso más porque el sistema está anulado y no se pueden presentar nuevos reportes. Hay una supresión artificial de la cantidad de muertes. Entonces ¿cuál es el umbral de muertes? ¿Cuántas muertes estamos dispuestos a tolerar? Ese es el problema en el corto plazo.

- ¿Qué podemos esperar a largo plazo?
- Hay evidencia definitiva sobre un riesgo aumentado de padecer cáncer o enfermedades autoinmunes y quién sabe cuál será su efecto sobre la longevidad a largo plazo. Las personas con enfermedades crónicas viven menos. El cáncer y las enfermedades autoinmunes definitivamente reducen el tiempo de vida de los seres humanos. Y luego tenemos otra preocupación que es la infertilidad. Estudios en Japón han demostrado que estas vacunas causan daños en los ovarios e inflamación del escroto en los hombres. Así que tampoco sabemos cuáles serán sus efectos a largo plazo sobre la fertilidad. Pero incluso esta no es la cuestión principal.

- ¿Cuál es?
- La preocupación principal es aquella sobre la que están alertando los principales inmunólogos a nivel mundial: el potencial genocidio de la humanidad.

- ¿Qué significa esto?
- En la década del 60 hicimos la vacuna contra el virus sincitial respiratorio (VSR), que se aplicó en niños y mató a más niños que los que mataba el VSR. Ocurrió que los anticuerpos generados por la vacuna, cuando se exponían al VSR, mataban a la persona. Producía un desastre en la autoinmunidad. Lo mismo pasó en los 70 con la vacuna contra el dengue, al producir una hiper reacción autoinmune, llamada ADE (Antibody dependent Enhancement) o amplificación de la infección dependiente de anticuerpos. Eso mató a las personas. Históricamente, todos los intentos de vacunas contra el coronavirus en modelos animales han producido exactamente lo mismo: han matado al animal debido a la reacción inmune. En otras palabras, se generaban los anticuerpos a partir de las vacunas, pero cuando éstos se veían enfrentados al virus real, la mayoría moría por esta reacción peligrosa llamada ADE.
El premio Nobel Luc Montagnier, que descubrió el VIH, está gritándole al mundo que este es el mayor genocidio en la historia de la humanidad. El doctor Robert Malone, uno de los miembros originales del grupo que desarrolló la vacuna de ARNm está diciendo que estas vacunas son demasiado peligrosas y que el gobierno le está mintiendo a las personas y que estamos empezando a ver los primeros signos del ADE. La doctora Dolores Cahill, la inmunóloga de Irlanda, está afirmando que dentro de dos años el 90% de los vacunados estará muerto. Mike Yeadon, el ex vicepresidente y director del programa de desarrollo de vacunas de Pfizer, está diciendo que por cada niño que muera naturalmente por covid, 100 morirán a causa de la vacuna.

- Es realmente horroroso.
- ¿Cuál es la diferencia si tomo a un niño y le corto la garganta o si agarro un niño y lo tiro en un volcán o si tomo a un niño y le inyecto un líquido que matará 100 a 1? ¿Cuál es la diferencia? Es el sacrificio de un niño.

- Pero la FDA ha dado aprobación a la primera vacuna denominada Comirnaty…
- En realidad no lo ha hecho. Dio aprobación a una sustancia que ni siquiera está disponible en Estados Unidos y extendió la autorización de uso de emergencia para la vacuna Pfizer que sí está en Estados Unidos. Y la razón por la que hicieron eso es porque mientras esté bajo la autorización de uso de emergencia tiene ciertas protecciones frente a los litigios.

- Resulta inquietante.
- Mire, antes que nada, se aceleró el proceso de la vacuna a menos de un año, cuando habitualmente toma 10. Se saltearon todas las medidas de seguridad regulatorias y usualmente tienen un comité que permite el comentario público y la exploración de potenciales efectos adversos, pero ellos anularon completamente eso y la FDA dijo que no hay preocupaciones, lo cual es la mayor mentira en la historia. Por lo tanto, este es un malvado intento coordinado -muy bien orquestado-, excepcionalmente ejecutado, de cambiar la estructura social, política y económica del mundo para que muy pocas personas tengan control sobre todas las demás. La prueba es muy simple: hay información que salva vidas y el acceso a esa medicación que salva vidas ha sido ocultada a la fuerza.

- ¿En qué momento advirtió que los lineamientos para la atención de los pacientes covid que desarrollaron las principales agencias sanitarias mundiales no permitían salvar vidas y que el camino correcto era otro?
- Hace 19 meses, porque todas las agencias de salud me decían que enviara a mis pacientes a su casa hasta que empeoraran y luego debieran ser hospitalizados y murieran. Y eso no tenía sentido para mí. Desde el día uno traté de encontrar un abordaje que evitara que enfermaran más. Eso fue lo que hice y cuando se hizo evidente y lo probé, los mismos cuerpos regulatorios ocultaron esa información. Así que supe de inmediato que el interés de ellos no recaía sobre la protección de los ciudadanos, sino que más bien estaban sirviendo a otros amos. Por ejemplo, si uno mira la recomendación actual del NIH, dice que no se trate el covid hasta que el paciente esté en el hospital, con un nivel de oxígeno menor a 92. Esa es la recomendación de un gobierno que quiere que mueras. Es contraria a todos los datos revisados por pares, contraria al sentido común, contraria a miles de médicos que trataron a miles de pacientes bajo su exitoso cuidado, que están demostrando una reducción del 85% de las hospitalizaciones y muertes cuando son tratados en el momento apropiado.

- Eso es lo que usted logró con su protocolo. ¿Correcto?
- Sí, mi protocolo es muy simple. Se trata de identificar a los pacientes de alto riesgo, tratarlos de inmediato, no esperar a que estén enfermos y administrarles un abordaje antiviral basado en zinc y un sistema de suministro de zinc. El zinc inhibe la enzima más importante implicada en la replicación viral de ARN, llamada ARN polimerasa dependiente de ARN, que es utilizada por TODAS las cepas del covid, lo cual significa que no importa si es alfa, beta, sudafricana, delta o la que sea que venga, todas utilizan la misma vía para la replicación viral. Por lo que, si uno bloquea esa enzima ARN polimerasa dependiente de ARN, lo cual el zinc hace, se cierra el botón de la capacidad del virus de hacer copias de sí mismo y propagarse. El problema con el zinc es que no se introduce por sí mismo en la célula. Es como una bala sin un revolver. Se necesita un revolver, otro agente que suministre el zinc dentro de la célula. Hay una clase de sustancias denominadas ionóforos de zinc, que abren un canal dentro de la membrana de la célula, permitiendo que el zinc pase de afuera hacia adentro de ella. Y hay cuatro de ellos que están fácilmente disponibles, dos son de venta libre: la quercitina y la epigalocatequina-3-galato (EGCG). La quercitina es un derivado de plantas, viene de los vegetales, es un bioflavonoide, que junto con la vitamina C funciona como un sistema de suministro de zinc.
Esta información está basada en estudios revisados por pares en los servidores del NIH. Lo maravilloso de esto es que son medicamentos de venta libre, al menos en Estados Unidos. Por eso, las dos razones para morir hoy por covid son el gobierno bajo el cual uno viva y el doctor que uno elija. De modo que el público puede conseguir quercitina, vitamina C, vitamina D y zinc y tomarlo de la manera adecuada (tengo toda esta información en mi sitio web vladimirzelenkomd.com a la que se puede acceder de manera gratuita). La otra sustancia que mencioné fue EGCG, que es un extracto del té verde. Esto es lo más natural que puede haber. Estas sustancias trabajan para hacer que el zinc ingrese a la célula.
En tanto, los dos mejores abordajes son la ivermectina y la hidroxicloroquina. El problema con ellas es que su prescripción ha sido vilipendiada por médicos, por los medios y por el gobierno y son difíciles de conseguir y eso causa una demora en el tratamiento, que es lo que mata a las personas.

- Además son fármacos muy conocidos y seguros.
- Los efectos adversos de las vacunas contra el covid se están ocultando. Los datos del VAERS son solo una fracción de la realidad así que quién sabe cuál es el verdadero número de muertes producto de la vacuna.  Mi punto es este: tenemos una enfermedad que en la mayoría de los casos las personas se recuperarán por sí solas por lo que no necesitan nada. La población de alto riesgo, si es tratada de manera adecuada, tiene una tasa de mortalidad de menos del 1%. Sin embargo, las vacunas causan coágulos sanguíneos, inflamación de los corazones, abortos, un potencial genocidio por el ADE, riesgo de cánceres, riesgo de enfermedades autoinmunes y una futura infertilidad. ¿por qué demonios pondría algo en mi cuerpo con semejante perfil de riesgo?

- Muchos se preguntan cómo es posible que todos los médicos, todos los medios, todos los gobiernos, estén ocultando la verdad o, incluso peor, estén mintiendo.
- En realidad hay muy pocas personas que están ocultando la verdad, el resto son ovejas que siguen descerebradamente lo que se les dice mediante la falsa narrativa. No hace falta mucho para engañar a la humanidad. Solo hace falta tomar el control de algunas industrias clave de los medios, académicas y de la política. Si eso se combina con la industria de la coerción y la socavación, lo que se logra es una psicosis global inducida en la humanidad.

- ¿Qué opina del rol de los médicos en esta situación?
-  Hasta mayo o junio del año pasado podían alegar ignorancia, decir que no sabían y que hacían lo que se les estaba diciendo. Sin embargo, luego de ese periodo fue obvio para cualquiera con un cerebro pensante que nos estaban mintiendo y que los enfoques que estábamos poniendo en práctica eran insuficientes. Y la hipocresía fue que los médicos mismos, para sí mismos y para sus familias, estaban siguiendo mis protocolos, pero para sus pacientes estaban siguiendo la narrativa del gobierno. Así que en este punto estoy acusando a cualquier médico que cumpla con los planes de tratamiento tardío que conducen a muertes innecesarias y que son análogos a los nazis en la Segunda Guerra Mundial, “solo estaban cumpliendo órdenes”.

- Se ha generado una división del mundo entre los vacunados y los no vacunados. Y entre los que sostienen distintas miradas frente a este virus. Incluso se han generado enfrentamientos dentro de las propias familias…
- Absolutamente. En realidad, de una forma mucho más teológica. El mundo ha sido dividido  en dos sistemas de pensamiento que no pueden convivir ya más. Un sistema es la conciencia de Dios, es decir personas que creen que fuimos hechos a imagen de Dios, que la vida en sí misma tiene santidad y que no está en el rol del ser humano decidir cuántas personas debería haber en el planeta. Mientras que hay otro grupo que es impío y cree en las teorías de Darwin sobre la lucha por la supervivencia o en las teorías eugenésicas de Galton, que dicen que hay una jerarquía en la genética y que aquellos que están en lo elevado de la jerarquía tienen el mayor beneficio de supervivencia, lo cual les da el derecho de controlar lo que les pasa a los otros. Esto suena como un cuento, excepto que 80 años atrás murieron 200 millones de personas.
Ahora se trata de un pequeño grupo de personas que verdaderamente cree que han evolucionado hacia un nivel más elevado de conciencia y que eso les da el título para dictaminar lo que les sucederá a otros, cuántas personas vivirán en el planeta, cómo deben vivir las personas, qué deben comer y cosas así. En mi opinión, estos no son seres humanos evolucionados sino paganos involucionados. Esta es una repetición del relato bíblico sobre los seres humanos iniciando una guerra contra Dios. Seres humanos que creen que son Dios y que sienten que pueden esclavizar y matar a otros para satisfacer sus propias necesidades narcisistas y sociopáticas.
Sí, las familias se han dividido, los gobiernos están divididos, las personas están divididas, pero si se mira la causa de origen, las personas están divididas entre quienes tienen conciencia de Dios y quienes caminan hacia las falsas promesas por el “camino dorado” de las vacunas y de los oligarcas sociópatas. Esa es la prueba. Dios está poniendo a prueba a cada uno de los seres humanos y les está preguntando a quién van a seguir.

- ¿Qué podemos esperar que ocurra en los próximos años como consecuencia de esta vacunación masiva con productos no solamente experimentales sino además potencialmente letales?
- Ya estamos viendo el comienzo del genocidio. Estamos comenzando a ver la amplificación de la infección dependiente de anticuerpos. Hay que escuchar a expertos como Robert Malone, quien está diciendo que los títulos virales de personas vacunadas son mucho mayores que los de las no vacunadas. La titular de los CDC dijo que las personas que son vacunadas con las vacunas contra el covid -basándose en datos israelíes- están enfermando peor y tienen más hospitalizaciones que los no vacunados y que es por eso que es necesario una tercera dosis.

- Además pueden transmitir el virus…
- Sí. Lo que le he mostrado es que las vacunas son innecesarias, definitivamente no funcionan y son realmente peligrosas. El análisis del riesgo-beneficio claramente favorece el no recibirla.

- ¿Cree que habrá un final a toda esta locura que estamos viviendo o esto continuará? Están hablando de terceras dosis y que el próximo año volveremos a vernos confrontados con el virus ¿Qué opina?
- Todo depende de uno. Depende de personas que, como usted, estén dispuestas a compartir la verdadera narrativa y ayudar a las personas a salir de la psicosis global en la que están inmersas y a que dejen de vivir como ovejas sin cerebro. Porque somos muchos, muchos, más que ellos. Y lo único que hace falta es que digamos que no.


Agustina Sucri

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Copiado del original en la fuente:

https://www.laprensa.com.ar/505981-Covid-19-Esto-no-es-una-teoria-conspirativa-es-una-conspiracion.note.aspx

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lunes, 31 de mayo de 2021

Peligros de la Mejora Dependiente de Anticuerpos de la vacuna contra coronavirus


Después de ser aplicada esta vacuna contra el coronavirus masivamente, en el primer año o dos puede parecer que no existe un problema de seguridad real, y con el tiempo, un mayor porcentaje de la población mundial será vacunado debido a esta supuesta “seguridad” . Durante este período intermedio, el virus está ocupado mutando. Finalmente, los anticuerpos que los individuos vacunados tienen en su torrente sanguíneo ahora se pueden volver no neutralizantes porque no se pueden unir al virus con la misma afinidad debido al cambio estructural resultante de la mutación. La disminución de las concentraciones del anticuerpo a lo largo del tiempo también contribuiría a este cambio hacia la no neutralización. Cuando estas personas previamente vacunadas están infectadas con esta cepa diferente de SARS-CoV-2, podrían experimentar una reacción mucho más severa al virus.

Independientemente de la convicción de alguien sobre las vacunas, la Mejora dependiente de anticuerpos (ADE), debe ser reconocida. Este artículo, explica cómo funciona ADE y los peligros futuros que puede traerEn este momento, se estima que la tasa de mortalidad del virus es aproximadamente del 0.26%, y este número parece estar disminuyendo a medida que el virus se está atenuando naturalmente en la población. Sería una gran equivocación vacunar a toda la población contra un virus con una tasa de mortalidad tan baja, especialmente teniendo en cuenta el considerable riesgo presentado por ADE. A pesar de esto los laboratorios fabricantes estarán exentos de reclamaciones de responsabilidad por la vacuna contra el coronavirus en la mayoría de los países

Los medicamentos basados en anticuerpos y las vacunas contra el síndrome respiratorio agudo severo coronavirus 2 (SARS-CoV-2) se están acelerando mediante el desarrollo clínico y preclínico. Los datos del estudio del SARS-CoV y otros virus respiratorios sugieren que los anticuerpos anti-SARS-CoV-2 podrían exacerbar el COVID-19 a través de la mejora dependiente de anticuerpos (ADE). Estudios previos de vacunas contra el virus sincitial respiratorio y el virus del dengue revelaron riesgos de seguridad clínica humana relacionados con el ADE, lo que resultó en ensayos de vacunas fallidos. Aquí, describimos los mecanismos clave de ADE y discutimos las estrategias de mitigación para las vacunas y terapias del SARS-CoV-2 en desarrollo. También describimos los datos publicados recientemente para evaluar los riesgos y oportunidades de la protección basada en anticuerpos contra el SARS-CoV-2.

Anticuerpo Neutralizante

Para que una vacuna funcione, nuestro sistema inmunitario necesita ser estimulado para producir un anticuerpo neutralizante. Un anticuerpo neutralizante es aquel que puede reconocer y unirse a alguna región (‘epítopo’) del virus, y que posteriormente da como resultado que el virus no entre o no se replique en sus células.

Anticuerpo no Neutralizante

Un anticuerpo no neutralizante es aquel que puede unirse al virus, pero por alguna razón, el anticuerpo no logra neutralizar al virus. Esto puede ocurrir, por ejemplo, si el anticuerpo no se une lo suficientemente fuerte al virus, o si el porcentaje de la superficie del virus cubierto por el anticuerpo es demasiado bajo, o la concentración del anticuerpo no es lo suficientemente alta. Básicamente, existe algún tipo de unión genérica del anticuerpo al virus, pero no logra neutralizar el virus.

Después de la vacunación, los anticuerpos que se unen al virus SARS-CoV-2 aún pueden neutralizarlo e incluso podrían facilitar la infección. A. Iwasaki e Y. Yang, Nat. Rev. Immunol.

Mejora dependiente de anticuerpos (ADE)

En algunos virus, si una persona alberga un anticuerpo no neutralizante contra el virus, una infección posterior por el virus puede provocar que esa persona provoque una reacción más severa al virus debido a la presencia del anticuerpo no neutralizante. Esto sucede solo en algunos virus. Esto se llama Mejora dependiente de anticuerpos (ADE) y es un problema común con el virus del dengue, el virus del Ébola, el VIH, el VSR y la familia de los coronavirus. De hecho, este problema de ADE es una razón importante por la cual fallaron muchos ensayos de vacunas previas para otros coronavirus. Se observaron importantes problemas de seguridad en modelos animales. Si ADE ocurre en un individuo, su respuesta al virus puede ser peor que su respuesta si nunca antes hubieran desarrollado un anticuerpo.

Un anticuerpo puede convertirse en un anticuerpo no neutralizante simplemente porque no se une a la porción correcta del virus para neutralizarlo o porque el anticuerpo se une demasiado débilmente al virus. Esto también puede ocurrir si la concentración de un anticuerpo neutralizante disminuye con el tiempo y ahora ya no tiene la concentración suficiente para causar la neutralización del virus. Además, un anticuerpo neutralizante puede pasar posteriormente a ser un anticuerpo no neutralizante cuando se encuentra con una cepa diferente del virus.

Se desconoce el mecanismo exacto de la Mejora dependiente de anticuerpos, ADE en el SARS, pero la teoría principal se describe de la siguiente manera:

En ciertos virus, la unión de un anticuerpo no neutralizante al virus puede dirigir al virus a ingresar e infectar sus células inmunes. Esto ocurre a través de un receptor llamado FcγRII. FcγRII se expresa en el exterior de muchos tejidos de nuestro cuerpo, y en particular, en macrófagos derivados de monocitos, que son un tipo de glóbulo blanco. En otras palabras, la presencia del anticuerpo no neutralizante ahora dirige al virus a infectar las células de su sistema inmune, y estos virus pueden replicarse en estas células y causar estragos en su respuesta inmune. Un extremo del anticuerpo se adhiere al virus y el otro extremo del anticuerpo se adhiere a una célula inmune. Esencialmente, El anticuerpo no neutralizante permite al virus engancharse para infectar las células inmunes. Puedes ver esto en la imagen de arriba.

Esto puede causar una respuesta hiperinflamatoria, una tormenta de citoquinas y una desregulación general del sistema inmunitario que permite que el virus cause más daño a nuestros pulmones y otros órganos de nuestro cuerpo. Además, los nuevos tipos de células en todo nuestro cuerpo ahora son susceptibles a la infección viral debido a la vía de entrada viral adicional facilitada por el receptor FcγRII, que se expresa en muchos tipos de células diferentes.

Lo que esto significa que esta vacuna, puede hacer que el sistema inmunitario produzca un anticuerpo para la vacuna, y luego, cuando su cuerpo es realmente desafiado con el patógeno real, la infección es mucho peor que si no hubiera sido vacunado.

Es muy probable que los factores genéticos, así como el estado de salud del individuo, puedan desempeñar un papel en la modulación de esta respuesta. Dicho esto, hay muchos estudios (en la sección de referencia a continuación) que demuestran que ADE es un problema persistente con los coronavirus en general, y en particular, con los virus relacionados con el SARS. Se sabe menos, por supuesto, con respecto al SARS-CoV-2, pero las similitudes genéticas y estructurales entre el SARS-CoV-2 y los otros coronavirus sugieren que este riesgo es real.

ADE ha demostrado ser un desafío serio con las vacunas de coronavirus, y esta es la razón principal por la que muchos han fallado en los primeros ensayos in vitro o en animales. Por ejemplo, los macacos rhesus que fueron vacunados con la proteína Spike del virus del SARS-CoV demostraron daño pulmonar agudo severo cuando fueron desafiados con el SARS-CoV, mientras que los monos que no fueron vacunados no lo hicieron. De manera similar, los ratones que fueron inmunizados con una de cuatro vacunas diferentes de SARS-CoV mostraron cambios histopatológicos en los pulmones con infiltración de eosinófilos después de ser expuestos al virus del SARS-CoV. Esto no ocurrió en los controles que no habían sido vacunados. Un problema similar ocurrió en el desarrollo de una vacuna para FIPV, que es un coronavirus felino.

Para que una vacuna funcione, los desarrolladores de vacunas necesitarán encontrar una manera de sortear el problema de ADE. Esto requerirá una solución muy novedosa, y puede no ser alcanzable, o al menos, predecible. Además, la vacuna no debe inducir ADE en cepas posteriores de SARS-CoV-2 que emergen con el tiempo, ni a otros coronavirus endémicos que circulan cada año y causan el resfriado común.

Un desencadenante importante de ADE es la mutación viral.

Los cambios en la secuencia de aminoácidos de la proteína Spike (que es la proteína del virus que facilita la entrada a nuestras células a través del receptor ACE2) pueden causar una deriva antigénica. Lo que esto significa es que un anticuerpo que una vez fue neutralizante puede convertirse en un anticuerpo no neutralizante porque el antígeno ha cambiado ligeramente. Por lo tanto, las mutaciones en la proteína Espiga (Spike) que ocurren naturalmente con los coronavirus podrían presumiblemente provocar ADE. Dado que estas cepas futuras no son predecibles, es imposible predecir si ADE se convertirá en un problema en una fecha futura.

Este problema de imprevisibilidad inherente se destaca en el siguiente escenario: una vacuna de coronavirus puede no ser peligrosa inicialmente. Si la prueba inicial parece positiva, los esfuerzos de vacunación masiva probablemente se administrarían a una gran parte de la población. En el primer año o dos, puede parecer que no existe un problema de seguridad real, y con el tiempo, un mayor porcentaje de la población mundial será vacunado debido a esta “seguridad” percibida. Durante este período intermedio, el virus está ocupado mutando. Finalmente, los anticuerpos que los individuos vacunados tienen flotando en su torrente sanguíneo ahora se vuelven no neutralizantes porque no se pueden unir al virus con la misma afinidad debido al cambio estructural resultante de la mutación. La disminución de las concentraciones del anticuerpo a lo largo del tiempo también contribuiría a este cambio hacia la no neutralización. Cuando estas personas previamente vacunadas están infectadas con esta cepa diferente de SARS-CoV-2, podrían experimentar una reacción mucho más severa al virus.

Irónicamente, en este escenario, esta vacuna haría que el virus fuera más patógeno en lugar de menos patógeno. Esto no es algo que los productores de vacunas puedan predecir o probar con un nivel de confianza real desde el principio, y solo se hará evidente en un momento posterior.

De acuerdo a Nature Biotechnology publicada el 5 de junio, 2020:

 “Es importante hablar de eso [ADE]”, dice GregoryGlenn, presidente de Novavax, que lanzó su prueba de vacuna COVID-19 en mayo de 2020. Pero “no podemos ser demasiado cautelosos. La gente se está muriendo. Así que tenemos que ser agresivos aquí”

 Gregory Glenn, presidente de  Novavax, Nature Biotechnology publicada el 5 de junio, 2020

Y del mismo artículo:

“ADE es una preocupación genuina”, dice el virólogo Kevin Gilligan, consultor senior de Biologics Consulting, que aconseja estudios de seguridad exhaustivos. “Porque si se dispara la pistola y se distribuye ampliamente una vacuna que potencia la enfermedad, eso sería peor que no aplicar ninguna vacuna”. (Publicado el 5 de junio de 2020).

La industria de las vacunas es consciente de este problema. El grado en que lo están tomando en serio, es otra cuestión.

Si bien muchos desarrolladores de vacunas son conscientes del problema, algunos de ellos están abordando el problema con más actitud de “laissez-faire”, minimizando el problema. Ven este problema como “teórico” con la idea de que los ensayos con animales deberían descartar el potencial de ADE en humanos.

Por otro lado no es ético realizar estudios de “desafío” en humanos. En otras palabras, un ensayo clínico para una vacuna no incluye administrar la vacuna a una persona y luego exponer a esta persona al virus después de la vacunación para controlar su reacción. En los ensayos clínicos, a los humanos solo se les administra la vacuna, no se les “reta” con el virus salvaje después. En estudios con animales, realizan una prueba de desafío para observar cómo responden los animales a la infección con el virus real después de ser vacunados.

Como se señaló anteriormente, el desarrollo de diferentes cepas virales en los años posteriores podría presentar un problema importante que no se nota durante las pruebas de seguridad iniciales en humanos o animales.

¿Qué pasa con las personas no vacunadas que están naturalmente infectadas con el virus y desarrollan anticuerpos? ¿Podrían estas personas experimentar ADE  a una cepa futura de SARS-Cov2?

Otros factores competitivos y no competitivos en nuestro sistema inmunitario

La respuesta ADE es en realidad mucho más complicada porque existen otros factores competitivos y no competitivos en nuestro sistema inmunitario que contribuyen a la respuesta ADE, muchos de los cuales no se comprenden completamente. Parte de esa ecuación es una variedad de diferentes tipos de células T que modulan esta respuesta, y estas células T responden a otras porciones (epítopos) del virus. En una vacuna, nuestro cuerpo normalmente se presenta con una pequeña parte del virus (como la proteína Spike) o un virus modificado (atenuado o muerto) que es más benigno. Una vacuna no expone la totalidad de nuestro sistema inmunitario al virus real.

Estos tipos de vacunas solo provocarán anticuerpos que reconocen la porción del virus que está presente en la vacuna. Las otras porciones del virus no están representadas en el conjunto de anticuerpos. En este escenario, es mucho más probable que los anticuerpos inducidos por la vacuna puedan convertirse en anticuerpos no neutralizantes, porque el virus completo no está cubierto de anticuerpos, solo la porción que se utilizó para desarrollar la vacuna.

Infección Real vs Vacuna

En una infección real, nuestro sistema inmunitario está expuesto a todos los rincones del virus completo y, como tal, nuestro sistema inmunitario desarrolla una panacea de anticuerpos que reconocen diferentes porciones del virus y, por lo tanto, cubren más virus y se neutralizan. Además, nuestro sistema inmunitario desarrolla respuestas de células T a cientos de epítopos peptídicos diferentes a través del virus; mientras que en la vacuna la gran cantidad de estas respuestas de células T están ausentes. Los investigadores ya son conscientes de que la respuesta de las células T desempeña un papel cooperativo en el desarrollo o la ausencia de la respuesta ADE.

En base a estas diferencias y la respuesta inmunológica sesgada que es inherente a las vacunas, creo que el riesgo de ADE es un orden de magnitud mayor en un sistema inmunitario preparado para vacuna que en un sistema inmunitario preparado para virus. Esto sin duda se hará más evidente a medida que COVID-19 progrese a lo largo de los años, pero la carga de la prueba recae sobre los hombros de la industria de las vacunas para demostrar que ADE no será una amenaza en el corto o largo plazo. Una vez que se administra una vacuna y las personas desarrollan anticuerpos contra alguna tergiversación del virus, no se puede revertir. Nuevamente, este es un problema que podría manifestarse en una fecha posterior.

Otra posibilidad es una reacción de inflamación alérgica

El problema de ADE, no es la única vía o mecanismo que podría presentar un problema para las personas infectadas después de la vacunación. Otra vía se rige por la inmunopatología Th2, en la que una respuesta defectuosa de células T inicia una reacción de inflamación alérgica. Una segunda vía se basa en el desarrollo de anticuerpos defectuosos que forman complejos inmunes, que luego activan el sistema del complemento y, en consecuencia, dañan las vías respiratorias. Estas vías también son riesgos potenciales para el SARS-CoV2.

En este momento, se estima que la tasa de mortalidad del virus es aproximadamente del 0.26%, y este número parece estar disminuyendo a medida que el virus se está atenuando naturalmente en la población. Sería una gran equivocación vacunar a toda la población contra un virus con una tasa de mortalidad tan baja, especialmente teniendo en cuenta el considerable riesgo presentado por ADE. El riesgo de desarrollar ADE en un individuo vacunado será mucho mayor que 0.26% y, por lo tanto, la vacuna puede empeorar el problema, no mejorarlo. Sería el mayor error del siglo ver aumentar la tasa de mortalidad de este virus en los años venideros debido a esfuerzos descuidados y apresurados para desarrollar una vacuna con un umbral tan bajo de pruebas de seguridad y la posibilidad de que ADE esté al acecho en las sombras.

Con suerte, ahora se sabe un poco más sobre el tema de la mejora dependiente de anticuerpos y los peligros reales e impredecibles de una vacuna contra el coronavirus. Al final, nuestra salud debería ser nuestra decisión, no la de un burócrata que no sabe lo básico sobre biología molecular presionado por los intereses de los laboratorios.  

Vacuna de la gripe relacionada al Coronavirus , Dra. Maria José Martínez Albarracín – Médicos por la Verdad

Pathogenic priming

Pathogenic priming likely contributes to serious and critical illness and mortality in COVID-19 via autoimmunity https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2589909020300186?dgcid=api_sd_search-api-endpoint https://doi.org/10.1016/j.jtauto.2020.100051 – https://dryburgh.com/james-lyons-weiler-coronavirus-vaccine-safety-warning/

Simplificado se dice cebado patógeno cuando el sistema inmunológico reacciona al coronavirus y cuando descompone al virus en pequeños componentes, detecta las diferentes proteínas del coronavirus y luego desarrolla una reacción inmune a esos componentes, pero alguno de estos componentes del coronavirus son muy similares a nuestra propia proteína humana y entonces el sistema inmunológico comienza a reaccionar en contra nuestra propia proteína humana, a esto se le llama cebado patógeno (pathogenic priming) o magnificación o mejora dependiente de anticuerpos ADE, le dicen mejora pero lo que mejora es la potencia del virus para enfermarnos, el sistema inmunológico ataca nuestro propio tejido, y se vuelve demasiado reactivo.

Respuesta del pecado antigénico original a virus de ARN e inmunidad antiviral

Original Antigenic Sin Response to RNA Viruses and Antiviral Immunity doi: 10.4110/in.2016.16.5.26 1 https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5086450/

La inmunidad cruzada (o reactividad cruzada) se define como la capacidad de nuestro sistema inmunitario para actuar con anticuerpos previamente generados contra un virus, frente a otro virus altamente similar. Se ha demostrado que una infección previa con la cepa del virus de la gripe H1N1 confiere cierta inmunidad cruzada frente a otra cepa similar, la H5N1. Esto también ocurre en la familia de los coronavirus: la respuesta frente al SARS-CoV-1 puede generar anticuerpos con reactividad cruzada frente al coronavirus que causa resfriado común (HCov-OC43) y viceversa.

La memoria inmune orientada a luchar contra un patógeno previamente reconocido, tiende a recordar una forma original del patógeno cuando una forma variante invade posteriormente. Esto se ha denominado “pecado antigénico original”. Este efecto inmunológico adverso puede alterar la eficacia de la vacuna y en ocasiones, provocar una mayor patogenicidad o respuestas inflamatorias adicionales, según el tipo de patógeno y las circunstancias de la infección. Aquí nuestro objetivo es brindar una comprensión conceptual simplificada de la infección por virus y el pecado antigénico original comparando y contrastando los dos ejemplos de infecciones recurrentes, como los virus de la influenza y el dengue en humanos.

La (Original Antigenic Sin) OAS fue descrita por primera vez por Davenport et al. para explicar las respuestas de anticuerpos que se generaron después de la infección por el virus de la influenza en personas de diferentes grupos de edad ( 1 ). Luego se sugirió que los mecanismos de formación de anticuerpos parecen estar dirigidos por infecciones infantiles iniciales, de modo que la exposición a cepas relacionadas antigénicamente más adelante en la vida da como resultado un refuerzo progresivo del anticuerpo primario. Según esta sugerencia, la OAS podría ‘congelar’ o neutralizar el repertorio inmunológico contra un patógeno ( 2 ).

El mecanismo de congelación del repertorio de la OAS se entiende como parte de las respuestas de memoria inmunitaria codificadas de forma rígida contra un posible patógeno recurrente ( 3 ). Investigaciones recientes han demostrado que, aunque parece ser dependiente de patógenos, esta respuesta de memoria también se encuentra durante las respuestas inmunitarias innatas y no se limita a la inmunidad adaptativa ( 4 ). Este mecanismo protegería al huésped del patógeno como un equipo de defensa bien entrenado. La inmunidad contra el sarampión, las paperas y la viruela, entre otros, es un buen ejemplo de respuestas de memoria que brindan protección de por vida después de una sola infección natural ( 4 , 5). Desafortunadamente, la mayoría de los patógenos se adaptan a este programa inmunológico cambiando constantemente sus moléculas de superficie. La razón por la que se estigmatiza a la OAS como ‘pecado’ es su interferencia con la respuesta inmune ingenua contra variantes del patógeno ( 6 ). En esta revisión, presentamos el concepto de OEA como un tipo de ‘congelación del repertorio inmune’, cuyo resultado puede tener impactos tanto positivos como negativos en las respuestas inmunes contra patógenos y en el curso de enfermedades causadas por tales agentes.

 

CONCLUSIÓN

OAS puede aprovecharse para defenderse de un patógeno, o un patógeno puede aprovechar OAS para ingresar a la célula huésped a través del mecanismo de ADE. La OAS también puede dar lugar a respuestas inflamatorias exageradas cuando existe una disparidad entre la tasa de proliferación del patógeno y el potencial protector contra el patógeno, que podría ser proporcionado por las células B de memoria de reacción cruzada. Las respuestas de las células B de memoria de reacción cruzada normalmente protectoras de OAS que se convierten en modos ‘autodestructivos’ de formación de complejos inmunes con un patógeno, durante la ‘batalla’ contra un patógeno de rápida replicación parecen ser las víctimas inevitables de la ‘guerra’ entre el sistema inmunológico humano y los patógenos. Desde un punto de vista evolutivo, la diversidad de MHC en humanos podría representar una movilización contra tal evento; pero desde el punto de vista individual, los adultos jóvenes que tienen un repertorio de la OAS contra los virus de la influenza, potencialmente a través de muchas infecciones naturales e incluso sin vacunación, podrían convertirse en víctimas. El complejo principal de histocompatibilidad (MHC) es una serie de genes que codifican proteínas de la superficie celular que controlan la respuesta inmune adaptativa.

Las interacciones célula-célula de la respuesta inmune adaptativa son de importancia crítica en la protección contra patógenos. Estas interacciones están orquestadas por la sinapsis inmunológica cuyos componentes principales son el receptor de antígeno de células T (TCR) y la molécula del complejo principal de histocompatibilidad (MHC). Ver referencias en el link al estudio mencionado arriba de este tema.

Roxana Bruno PhD. Inmunología, Inmunidad Colectiva

Dr. Eduardo Yahbes – Cuarentena

Dra Maria Jose Martinez, Test PCR ineficientes

80% de participantes con efectos adversos a vacuna contra coronavirus

 

Referencias

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